El proyecto permite cuidar el medio ambiente pero además mejorar la calidad de vida de otros paraguayos.

Son cada vez más los ciudadanos y empresas que están entendiendo la necesidad de cambiar la manera de relacionarnos con nuestro planeta. Lentamente empezamos a ser conscientes que el uso o mal uso que le damos a los recursos naturales finitos y/o renovables debe cambiar. La tendencia en este sentido es cada vez más clara: «todos podemos hacer algo» para colaborar y proteger nuestro planeta, sin que esto signifique una alta inversión.

Creemos que es tiempo de que empecemos a repensar la manera en que vivimos y hacemos negocios.

Esto es lo que nos motivó en MEDA PY y NatureOffice a explorar alternativas que brinden una solución a nivel local. El sistema además debía ser simple de aplicar y transparente. Mirando los esfuerzos en otros países, descubrimos una manera muy interesante de hacerlo: se llama «Protección Voluntaria del Clima». Además estamos permitiendo que 300 familias paraguayas de escasos recursos, puedan cocinar de forma más higiénica y saludable a través de la construcción de fogones que evitan el uso excesivo de leña (menos emisión de CO2) y cocinar en el suelo.